Miguel Villegas Oropeza. (Un prisionero fusilado dos veces)

Resumen

Miguel Villegas Oropeza, soldado de las fuerzas obregonistas, Cuarta Batería de Ametralladoras del Segundo Batallón de Sonora. En los hechos acontecidos en la primera quincena de abril de 1915 en Celaya, la victoria obregonista sobre las fuerzas del norte, al mando de Pancho Villa, las tropas obregonistas mostraban el gusto por haber derrotado a Pancho Villa, había cientos de prisioneros y un botín enorme en cañones y armas. Miguel relata cómo trataban a los prisioneros. En la tropas obregonistas había yaquis y juchitecos, el triunfo de la revolución se le debe a los indios y a los obreros, llamados batallones rojos, que también pelearon en Celaya. El elemento Ferrocarrilero fue la espina dorsal del movimiento, con el transporte en trenes militares. Los yaquis peleaban mejor que ellos, son guerrilleros de su sierra (Sonora). Entre los prisioneros había jefes, aviadores, y fusilaron sólo de subtenientes para arriba, en grupos de 4 y 5. El general Benjamín Hill dio las órdenes a los juchitecos para fusilar a los prisioneros. A las tropas se les liberó. Fueron 110 fusilados en la Hacienda de San Juanico, en la parte poniente de Celaya. Eran villistas de corazón, al morir se tocaban el pecho y decían ¡Viva Villa!, fueron valientes. Cuando estaba cuidando a los cadáveres de fusilados, oyó un quejido sospechoso de entre los muertos, provenía de un bulto que se iba arrastrando, el teniente Marcelino González, se acercó y le disparó, antes de morir gritó ¡Viva Villa hijos de la…! El relato lo llamó Miguel Un prisionero fusilado dos veces. Queda como testimonio de “La clase de hombres que hicieron la revolución, hombres cuya lealtad espoloneaba la valentía”.