Document
Área de identificación
Serie
Clave de serie
I129ENL.a.
Distinción, reconocimiento
Proyecto
Derechos
Reservados
Licencia de uso
CC BY-NC-ND 4.0
Clave de inventario
I129ENL.a.0020
Nombre del programa
Jaime Ortiz Lajous
Número de programa
0020
Producción general y/o coproducción
Área de contenido
Género radiofónico
Resumen
Charla con el arquitecto y restaurador mexicano Jaime Ortiz Lajous. Nace en 1932 en la Ciudad de México, pero su familia es de Colima. Estudió en la Academia de San Carlos arquitectura. En 1952 ingresa a la universidad. Vivió el proceso de cambio de la escuela de San Carlos a Ciudad Universitaria. Después de terminar la carrera obtiene una beca para estudiar en el extranjero, (en la Escuela la Nacional de bellas artes) en Francia. Relata que en una visita a Oaxtepec le surgieron interrogantes sobre el abandono de monumentos, de ahí surge su interés por la restauración. Platica sobre el estudio en restauración, que surge en Europa a raíz de la post guerra y la necesidad de conservar monumentos históricos. La UNESCO promovió la Carta de Venecia en 1964 para unificar los criterios de restauración. En 1961 se abrió la Escuela de Restauración de Monumentos de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Roma, logró obtener una beca (estando en Francia), fue miembro de la segunda generación, estudió por dos años. Estudió en Europa con una beca del gobierno francés, la ayuda del Banco de México y la universidad (UNAM) le dio un año el sueldo de maestro. Estudió cuatro años en Europa y pudo conocer y apreciar los valores de México. El problema de restauración era esencialmente mexicano, ya que tiene que estar ligada a la identidad del pueblo, la restauración es un modo de recobrar la identidad y los valores. Hay que apreciar el pasado con una visión futura. Frase de Marguerite Yourcenart: “el pasado es la memoria del presente”. Al regresar a México (1964) trabajó en la Universidad de Guanajuato, en la arquitectura del túnel del río subterráneo que se reabrió y en quitar los letreros de la ciudad. Después trabajó seis años en el Comité Constructor de Escuelas, CAPSE, en vigilar que se construyeran bien las escuelas, eso le permitió viajar por toda la república y visitar monumentos. El arquitecto Vicente Medel lo invitó a trabajar en la secretaria de Patrimonio Nacional, cuyo director era Horacio Flores de la Peña. Ortiz Lajous fue nombrado subdirector de ingeniería y arquitectura. Trabajó 15 años en la consolidación de la arquitectura colonial de México. En 1972 surge la ley de Protección de Monumentos Históricos. Formó equipo con Manuel González Torres, Vicente Guerrero y Gama, Pedro Moctezuma, entre otros. La restauración no es obra de un solo hombre, requiere humildad, debe estar consciente del momento histórico al que se enfrenta, en que se construye el monumento, los procedimientos constructivos, respetar el paso del tiempo en el monumento. Expone los criterios de restauración de Viollet-le-Duc, Ruskin y Boito. Ahonda sobre la restauración de la Catedral Metropolitana, promovida por Sergio Saldívar, director de Monumentos del INBA. En la restauración de los órganos se respetó el diseño original, el número de registros, flautas, afectados por el incendio de 1968; se recurrió a un técnico holandés, Miguel Ángel Soto y su familia trabajaron la parte de carpintería. Explica que la ciudad de México se ha hundido 10 metros en 100 años, los edificios no se hunden parejo, la catedral se hundió de 2.80 m. de un lado y 1 m. del otro. Diseñaron un sistema de 560 pilotes de control a 40 metros de profundidad, las técnicas de ingeniería son mexicanas. La ciudad de México debe tener conciencia del uso del agua, que es la razón del hundimiento. Sacar el agua negra cuesta una fortuna. Comenta del apoyo del cardenal de México Ernesto Corripio Ahumada. Reconoce la labor del gobierno por salvar los monumentos históricos. Asevera que las decisiones sobre el patrimonio nacional deben ser colegiado, deben participar gobiernos estatales, municipales, iniciativa privada, comunidad, para descentralizar. Explica como los sismos de 1985 afectaron, por el fenómeno de resonancia, las estructuras de 6 a 12 pisos de altura. Las estructuras coloniales resistieron por la labor de conservación y restauración y por las masas grandes que resisten más, ya que están cimentadas en plataformas grandes de piedra con cal. Resalta la importancia de que el centro histórico siga poblado por familias, que los habitantes sean propietarios de sus viviendas, y no sólo en Ciudad de México. Aprovechar los sismos y valorar la restauración. No sólo son edificios, también la restauración de la dignidad nacional y personal del mexicano. Apreciar la historia, transmitirla en el presente y proyectarla a futuro.
Temas/Palabras clave
Patrimonio Cultural Nacional. Conservación de monumentos. Restauración. Restaurador mexicano
Idioma
Español
Fecha de transmisión
00/00/1987
Fecha de producción
00/00/1987
Fecha de codificación
30/06/2005
Observaciones
Este programa está contenido en los carretes 39, 40. Claves de digitalización: FN21060097845, FN21060097846. Datos biográficos: Jaime Ortiz Lajous. Nació 1 de diciembre de 1932 en la Ciudad de México. Realizó estudios de arquitectura en la Universidad Nacional Autónoma de México, la Escuela de Bellas Artes de París y la Universidad La Sapienza de Roma, donde se especializó en restauración de monumentos. Su trabajo se centró en la restauración de edificaciones históricas. Encabezó. La restauración de la Catedral de la Ciudad de México (su re cimentación y la rehabilitación del Retablo de los Reyes), así como de diversos inmuebles del Centro Histórico de la capital del país, entre ellos la Casa de los Azulejos, y de otras zonas de la ciudad, como el Convento del Desierto de los Leones. A principios de los años ochenta fundó, junto con otros personajes la Sociedad de Amigos del Centro Histórico de la Ciudad de México. Fue secretario ejecutivo de la Comisión de Preservación del Patrimonio Cultural de México, gerente de proyectos del Fideicomiso del Programa Emergente de Vivienda Fase 2 de la capital –que rehabilitó inmuebles dañados por el sismo de 1985– y miembro, cofundador y presidente para México del Centro Internacional para la Conservación del Patrimonio, entre otros puestos. Murió el 26 de marzo de 2017.